martes, 24 de marzo de 2009

Desde fuera y desde dentro

Escribe hoy un profesor lo siguiente:

"La imagen de deslavazada charlatanería y de enfermiza obsesión antisexual que ofrecen los pronunciamientos de la jerarquía católica no sólo choca con la ciencia y la racionalidad, sino que incluso carece de base o precedente alguno en las enseñanzas que los Evangelios atribuyen a Jesús."

Más allá de los argumentos que probablemente se encuentren en el artículo, es interesante la doble estrategia adoptada en estas líneas: la jerarquía eclesiástica no sólo menosprecia los avances de la ciencia y los preceptos de la racionalidad, sino que ni siquiera se atiene al mensaje de Cristo. Los ateos no sólo acuden a la estrategia externa (racionalidad y ciencia) sino también a la interna. La jerarquía, dicen, no interpreta correctamente el mensaje cristiano. Los ateos se alinean así con los cristianos sin iglesia, con los que claman por unos representantes de la fe que pongan la caridad como precepto primero y único.

Tal vez habría que recordar que la iglesia católica, apostólica y romana, sobre todo, romana, nunca ha tenido la pretensión de contribuir al aumento del amor. Su finalidad hoy es, antes bien, influir en el poder político, destruir los muros de separación, unir a los fieles en causas morales que pongan en dificultades a los gobiernos para lograr así que nadie, sólo ellos, se sienta impune.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

buenas noches,

Vattimo, ¿demócrata e ilustrado?

¿vida y muerte equiparadas?

¿derecho familiar islámico? (en realidad, la frase tiene guasa, porque lo que pone en condicional es en realidad la excusa de lo que luego afirma: ya me dirás qué tiene que ver ser equitativo con posibles huérfanos con la poligamia -¿huérfanos de la misma mujer, huérfanos de distintas mujeres? no queda claro). es una vergüenza que esto lo hayáis pasado por alto y sobre todo que ahora nos vengan con esta injusticia "caritativa" (en fin, la sempiterna "piedad peligrosa" de la que hablaba Zweig) nada menos que del "derecho islámico". aquí sí que no se comenta la tan cacareada separación entre Estado y derecho civil y Iglesia y derecho eclesiástico.

ay. ¿y eso de "Varguitas"? ¿a qué esta mala educación, como tan bien la llamó Sloterdijk hablando de esta nueva socialdemocracia que a falta de su complicidad con el totalitarismo soviético ha encontrado su filón en este nueva empanada mental llamada laicismo posmoderno?

el otro día fui a una misa. a una misa negra. a una misa de negros nigerianos residentes en Elche. no creo que crean en cosas absurdas. no creo que sea una tontería lo que hacen allí. es más, me pareció muy bien. y por supuesto el poso moral que les queda tiene que ver con sus convicciones públicas, respecto de la libertad, la modestia, la convivencia, lo que está bien o está mal, etc. tb pude comprobar la diferencia con la misa católica. pero la Iglesia católica es la heredera del Imperio Romano, y estos son sus problemas, no sus creencias ni siquiera su teología (judeo-)cristiana.

saludos.
seguiremos discutiendo.

Daniel Gamper dijo...

Es preocupante que no se reconozca la existencia de un "derecho de familia islámico". Creen algunos que el islam es bárbaro y basta, que no tiene instituciones para proteger a los que lo necesitan, que no contempla forma alguna de justicia, como si el único baremo fueran nuestras luces.

Anónimo dijo...

lo muy preocupante es que aquí no entre ninguna consideración sobre la separación de la filosofía y de la teología, de la esfera de lo civil y de la esfera de lo religioso. porque el llamado derecho de familia islámico es las dos cosas a la vez, o por mejor decir, puramente religioso y teológico. obviamente se puede defender que defiende a alguien, igual que se puede defender que esto es justicia. pero quizá el problema está en la concepción, teológica y religiosa, de "justicia" que se tiene. y por tanto en la misma concepción del "derecho". por lo demás, es justo el problema del Islam -como sabe quien ha estudiado un poco su origen- el anular la esfera de lo civil, no solo en términos puramente intelectuales, sino en términos físicos y diríamos que hasta urbanísticos. es un grave problema, se quiera o no afrontar.

"nuestras luces" no lo son por nada en especial, solo que son la tradición que viene de Grecia, básicamente, y pasa por Roma, Judea y el cristianismo.

yo no voy a reconocer que el derecho islámico de familia es justo, ni que el régimen de China es un tipo de democracia, porque simplemente no lo son. serán otra cosa, que sabemos llamar con otro nombre, pero no son "luces", entendiendo por "luces" lo que llamamos "luces" en Occidente desde y tal como he explicado.

lo demás es huero relativismo, perfectamente execrable.